miércoles, 11 de agosto de 2010

El antagonista del ayer

Me veo envuelta y atada de pies a cabeza, la presión no me deja respirar y aun menos gritar. Aunque de todas formas, si pudiera, ¿quién me escucharía, quien correría en mi auxilio?...
El héroe de mi historia, tras perder en la última contingencia, herido, se ocultó entre el bullicio de los pensamientos ajenos, de personas impersonales de otras historias mas convencionales.
Demostrando de esta forma que hasta los más grandes pueden caer en lo más bajo.
Esconderse, escudarse tras miradas frías, conversaciones distantes y entrecortadas.
Ya no se es ni la sombra de lo vivido, me muero de rabia e impotencia al vivir este mediocre fin...


Solo una vida, y con un tiempo límite para vivirla, ¿realmente queremos que así sea escrita?

1 comentario:

David dijo...

¿Quiénes son los héroes de este mundo? Resulta que siempre son archiconocidos. ¿Por qué? Quizás sólo sean productos de marketing, como es todo ahora. El héroe debe ser el que nos da asco, el que nos parece repugnare, el que nunca seguiríamos. ¿Por qué enamorarnos de un producto de la sociedad? Gracias, maniquíes cachondo/as están en todas las películas porno. Yo quiero un reto.

Todos caen. Hasta los más grandes. Pero, ¿quién se repone? Y hablo de reponerse de verdad, no de un parche. ¿Queda alguien en este mundo para mí? Nadie me llena nunca. No lo sé.

Canción: My Right. Screeching Weasel.