Calles depresivas comienzan a estrecharse,charcos abismales entorpecen mi camino,como no, patosa de mi siempre resbalo y caigo.
Todo va demasiado rápido,la gente ,los días,las estaciones,mis pasos...
A pesar de todo, siempre permanece anclado en algún lugar perdido un denominador común,inalterable, imperturbable ,impugnable...Eres ese pasado que siempre está presente .
Un pensamiento más de los que me sumo en mi exilio y tú estorbas en mi memoria porque haces que yo me divida en dos seres distintos: viviendo en el día que pudo ser y muriendo en el que me siento atrapada. Soy dos almas que se discuten por no hacer nada. Y tú… tú haces que yo tenga los pies fríos.Algún día te darás cuenta de que pudimos robar un pedazo de sol que nos hiciera brillar, que éramos más que dos simples niños que jugaban a ser adultos. Entre tú y mis demonios temo despertar en un día de noches eternas…
...y no es porque fueras el primero, es porque no pudiste ser.
una pausa en mi camino!
Para respirar profundamente.Uno, dos, tres segundos,siento como se me hielan los pulmones,el dolor gélido me recuerda que a pesar de todo sigo con vida.
Más capas de ropa ya no puedo llevar, malditas mañanas que se les pegan las sabanas y no se levantan hasta las tantas.
El frió no es un estado de animo que lleve con demasiada dicha.
¿Su parte buena?por fin llega la temporada de mi deporte favorito: la contemplación de mundos ajenos, desde la cama, bajo un promedio de cinco pesadas mantas.
y ahora el cristal de mi ventana se empeña...
despierto!¿cuanto tiempo llevo escribiendo?
No ha sido por la claridad de la noche, ni tan siquiera por el susurro del viento que me atrapa.
Es sólo por sentir de nuevo mis pies fríos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario